La victoria de Lameck

En la universidad medieval, cada vez que un alumno terminaba su grado se consideraba una victoria. Y si era el primero de una región el que lo lograba, su universidad pintaba un ‘Victor’ en una pared del claustro, registrando su nombre y la fecha de la victoria.

Así nos ha pasado hace poco con Bossvill, y ahora con Lameck.

La carta de Lameck

A Lameck lo conocí en 2016, al final de mi estancia en Kenia. Era un alumno de Desert Streams, de mirada despierta, y sin recursos para hacer la Secundaria: sin padre, malvivía con su madre y hermana en una chabola y no tenían apenas ingresos. Judy Oloo (directora de Desert Streams) me habló de él, pude conocerle, era simpatiquísimo y muy listo: apostamos por ayudarle a financiar el equivalente al bachillerato. Y lo hizo muy bien, en un colegio en Nairobi pero interno, lejos de Kibera.

Lamck con gorro rojo en 2016
Cuando terminó la Primaria

Tras la selectividad vio que la nota le permitía ir a la universidad. Sin recursos, pidió una beca para estudiar contabilidad en Strathmore University (donde yo di mis clases). Le dijimos que nos encargaríamos desde Karibu Sana de lo que no pudiera cubrir la beca: residencia, libros, ordenador, comidas…, a cambio de lo que él pudiera poner de su parte.

La semana pasada concluyó con la ceremonia de graduación, y me ha hecho llegar esta carta tan emocionante:

La carta de Lameck

De: Lameck Wangudi
Para: Javier Aranguren
8 de julio de 2025
ASUNTO: GRACIAS

Te escribo deseando que te encuentres bien de salud y de ánimo.

Al sentarme a escribir esta carta, me invade un poderoso sentimiento de gratitud y de nostalgia. Un sentimiento de gratitud. Acabo de terminar mis estudios universitarios y me he graduado oficialmente en Contabilidad, un hito que todavía me parece increíble. En su base, se encuentra tu patrocinio, tu fe en mí y tu inquebrantable generosidad.

No sólo me proporcionastes mi educación, sino algo de mayor valor: una oportunidad para construir una vida con propósito y significado.

Gracias a ti, pude experimentar la vida universitaria al completo. Asistí a clase cada día con la certeza de que alguien confiaba en mis capacidades. Participé en actividades, liderazgo y servicios comunitarios, que me convirtieron en una persona más segura, reflexiva y capaz.

He hecho que mi madre se sienta orgullosa. Gracias a ti ella sonríe y agradece todo lo que has hecho por mí.

Además de estos logros académicos, he sido capaz de desarrollar habilidades de comunicación, disciplina, resiliencia y un mayor sentido de la responsabilidad. He aprendido a trabajar con la gente, a dirigir con compasión y a ser resistente en la adversidad, cosas que ningún libro de texto podría haberme enseñado pero que me servirán toda la vida. Tu apoyo me proporcionó el espacio y la seguridad necesarios para convertirme no sólo en un graduado, sino en una persona equilibrada y preparada.

Vuelvo a pensar en el día en que nos conocimos y compartí contigo  tu profunda amabilidad y cómo me conmovió. Ese encuentro me ha acompañado a lo largo de mi vida. Tu elección desinteresada de ayudar a forjar mi destino me ha enseñado mucho: no sólo a tener éxito, sino a tratar de vivir de  modo que haga mejores a otras personas. Me has enseñado el significado de dar sin esperar recompensa alguna, y me gustaría mantener ese espíritu en todo lo que haga.

Al comenzar mi nuevo capítulo, mi intención es trabajar al servicio de los demás, donde pueda llegar a ser una influencia positiva en la vida de otras personas, sobre todo de jóvenes que, como yo, simplemente están buscando a alguien que crea en ellos. Quiero ser ese faro de luz para alguien, igual que tú lo fuiste para mí.

Gracias por acompañarme en este camino, aunque sea desde la distancia. Tu presencia en mi vida es profunda y duradera. Llevaré esta gratitud conmigo para siempre: en todo lo que diga y haga, y enlos modos en que aprenda a devolver lo que se me ha dado.

 

Evidentemente, el ‘tú’ a quien va dirigida esta carta no soy yo, Javier Aranguren, sino todos los que con vuestra generosidad hacéis posible que ayudemos a estos jóvenes.

Lameck, el día de su graduación, con su madre y con Michael Babu, Karibu Sana en Kenia.

Otras grandes noticias

A lo largo de estas semanas han ocurrido otras cosas:

  • Fundación PwC nos hizo entrega del Primer Premio de su IXª edición de su Programa Apadrina, que irá íntegro para la construcción de un dormitorio más para las niñas de Dorothea Rescue Centre. Detrás de este premio hay mucho trabajo de Lucía Buxens y de la Fundación Promoción Social.

Lucía estaba así de feliz
  • En Kwetu Ruai (la casa central de los niños de la calle) acabamos de construir un pozo con el que llevábamos desde el año pasado: vino la máquina de hacer agujeros, la bendijo un sacerdote, y hay un montón de agua que va a hacer un gran servicio a estos niños y a toda la comunidad de la zona rural donde se encuentra la casa.

  • Fr. Edward (don Eduardo Díaz Caballero) visitó Kwetu y Dorothea con Carles y Cris, recién casados de viaje de novios, que quedaron encantados y quieren participar activamente en Karibu Sana. La visita empezó con una Misa con las niñas y terminó con una guerra de globos de agua ¡en la que todas fueron a por el cura!

  • Me llamó por teléfono Benjamin Kipataa, un niño masai con el que estuve en 2016, que ya no es un niño porque tiene 20 años y que ha hecho el primer año de una formación profesional superior en asuntos informáticos: estuve con ellos y con sus vacas cerca de Ruai, él puede acabar siendo el primer urbanita de su familia, y darles un empujón económico excepcional.
Benjamin, con su abuelo (ya fallecido), en 2016.
  • Y mi querido Víctor Mwenda, el primer niño de Karibu Sana, ha logrado aclararse con qué camino formativo seguir tras tiempo de dudas y de problemas familiares. Ha sido todo un proceso de maduración personal por el que confío en que se encuentre en condiciones de sacar un gran provecho a una formación profesional superior en un centro de Don Bosco en Karen, a las afueras de Nairobi.

¡Felices vacaciones!

 

 

Acuerdo con Fundación Adey

Tras muchos meses de trabajo entre la Fundación Promoción Social y la Fundación Adey, acabamos de poner en marcha un acuerdo. Por él la Fundación Adey donará en 2025 un total de 60.000€ para uno de nuestros proyectos.

Iván Aznar, que ha preparado magníficamente la propuesta desde Fundación Promoción Social

 

La Fundación Adey publica y explica el proyecto en su página web.

Proyecto

El propósito es fortalecer a Dorothea Rescue Centre, centro de acogida para niñas de entre 5 y 12 años que han vivido en las calles, expuestas a violencia, explotación y pobreza extrema. Karibu Sana busca proporcionar acceso a educación primaria y secundaria, y también fortalecer la rehabilitación emocional y física de las niñas para garantizar su bienestar integral.

En el diseño del proyecto ha trabajado Iván Aznar, de Fundación Promoción Social, junto a los expertos  de Fundación Adey. El pasado mes de junio visitaron Dorothea Rescue Centre y Strathmore University, que tiene un papel central como socio local que seguirá de cerca el proyecto.

A estas niñas les encanta bailar

Objetivos

Hemos atendido a varios factores:

Rescate y Rehabilitación:

  • Atención en el Dorothea Rescue Centre, que alberga a 40 niñas y cuenta con recursos para su bienestar físico y emocional.
  • Capacitaciones al personal del DRC en técnicas de rescate, atención psicológica y rehabilitación integral.
  • Protocolos personalizados para cada niña, asegurando su recuperación y reintegración social.

Acceso a la Educación:

  • Matrícula de las niñas en escuelas primarias y secundarias locales, con un 90% de tasa de permanencia esperada.
  • Programa de tutorías y apoyo académico para garantizar su rendimiento escolar.

Fortalecimiento Comunitario:

  • Sensibilización de las familias para promover la igualdad de género y el valor de la educación.
  • Construcción de una granja-huerto en el DRC, promoviendo la sostenibilidad alimentaria del centro

La generosidad, y la profesionalidad, de Fundación Adey permitirá atender de la educación de más de 30 niñas, fortalecer las capacidades de los profesionales que trabajan en Dorothea y apoyar al sostenimiento propio de Dorothea por medio de la creación de la granja–huerto.

Sister Carol, que empezó y dirige Dorothea Rescue Centre

Estamos realmente contentos e ilusionados por esta nueva oportunidad de servir a los (en este caso ‘las’) más necesitados.

Estudiar y llover

Lluvias

Desde hace unas semanas Kenia anda anegada en lluvias. Entre el fenómeno El Niño y unas corrientes cercanas a la India, el país ha pasado de la sequía al exceso de agua. Llevan casi 200 fallecidos, decenas de presas en peligro de rotura y fuertes inundaciones especialmente para la gente más necesitadas: los barrios de chabolas carecen de desagües y con frecuencia se construyen en torrenteras. Total, que el Gobierno ha decidido que los colegios abran dos semanas después de lo previsto. Esta semana es cuando los alumnos han vuelto a clase.

En Kibera
La casa de Blessings en Kibera

Proyectos

Las cosas (¡las personas!) van muy bien. Nuestro socio local, Strathmore University, sigue cubriendo el pago de las matrículas escolares (¡451!). Tanto ellos (Luis Borrallo y Michael Babu) como la Fundación Promoción Social (María Beamonte, Macarena Cotelo e Iván Aznar, además de todas las personas que trabajan allí) están trabajando duro para el gran proyecto que tenemos entre manos y que hará crecer Karibu Sana. Va a ir dirigido a fortalecer a los agentes de cambio con los que trabajamos: las Sisters de Kwetu y Dorothea, los profesores y administradores de varios colegios, los trabajadores sociales y psicólogos que se dedican a los niños de la calle, etc. Nuestra ilusión es invertir en formación y en salarios para que los mejores hagan el mejor trabajo posible con los niños.

Os conté de un pozo que vamos a hacer con Sister Lucy en Eldoret. Ya les hemos dado el dinero de nuestra participación. Hace unos días nos llegó la propuesta de otro, para Kwetu, que dará agua a los niños y a la granja que tienen allí, además de a la gente de la zona.

Alumnos

Samuel desde Kisumu, junto al Lago Victoria
Samuel desde Kisumu, en el Lago Victoria

He tenido varias conversaciones con Samuel. Tras más de cuatro años en la calle y una infancia dura en la ciudad de Kisumu, está a por todas en su penúltimo año de colegio y con ganas de universidad.

Joan con Judy
Joan con Judy, su madre

De la universidad también he hablado con Joan. Empezó el curso esta semana. Quiere ser psicóloga.

Donantes

Sobre donantes os cuento una muy bonita. Se puso en contacto conmigo alguien. Acababa de vender un piso. El negocio había salido bien. Me dijo que le buscara algo concreto para poder hacer una aportación extraordinaria. Y otra. Me dice una persona, María, que ahora que van a celebrar el XXV aniversario de boda pedirán que los regalos sean para Karibu Sana. Y lo más importante: las donaciones recurrentes que hacéis sostienen lo ordinario de este proyecto, a saber, el gasto en matrículas.

¿Verdad que es maravilloso?

Informe Karibu Sana 2023

He pedido a Manuel, que nos lleva esta página web, que nos ponga bonito este informe para dejarlo en PDF en la web, pero como eso lleva un tiempo, quería compartirlo ya con vosotros. Perdón por una entrada tan larga, aunque creo que merece la pena leerla.

 

Informe 2023

Cuando en octubre de 2015 empezó Karibu Sana (todavía sin nombre, sin metodología, sin propósito claro), no podía imaginar lo que llegaríamos a hacer entre todos los que colaboramos con este proyecto. Quiero, como todos los años, compartir con vosotros algunos datos de 2023, tanto para ejercitar la transparencia como, de modo muy especial, para daros muchas razones para estar alegres por vuestro esfuerzo. 

Ya contamos con certezas de beneficios conseguidos, y muchas infancias robadas por la pobreza y la violencia han sido rescatadas. Todo lo que cuento a continuación es un testimonio de los frutos de vuestra generosidad. Y sois generosos tanto cuando donáis como en vuestra confianza con quienes gestionamos vuestros donativos, que siempre estiramos hasta el último céntimo.

 

1. Logros

Empecemos por los frutos alcanzados en 2023. Creo que es bueno recordar que siempre apuntamos al largo plazo: educar a un niño lleva muchos años. Y luego todavía otros más hasta que cogen carrerilla para abrirse paso por el mundo. 

Los primeros niños y niñas que ayudamos, a partir de enero de 2016, ya han empezado a terminar el colegio. En un país que pasa por una difícil situación económica, tenemos entre ellos de todo:

    • algunos todavía no saben a qué dedicarse; 
    • Otros que se preparan en diversas formaciones profesionales; 
    • Los que se han perdido en el camino, a los que intentamos volver a hallar para animarles a seguir, dando oportunidades a los que apuestan por ellas; 
    • Dos, antiguos de Kwetu, que han entrado en el seminario católico de Nairobi; 
    • Algunos que han realizado la meritoria hazaña de comenzar la universidad, algo nada sencillo viniendo de entornos tan desfavorecidos y de colegios que están a años luz en calidad y en medios respecto a los colegios a los que van las personas más pudientes. Terminan cada año la Secundaria 550.000 alumnos y en las universidades públicas hay 70.000 plazas. La universidad no es para todos. Y el examen de selectividad tiende a estar algo corrupto, pues no es extraño que las preguntas se filtren a colegios que organizan ‘cursos de preparación’ muy caros. Pero para nuestros beneficiarios esto no es un obstáculo. 
Le falta un rato para la universidad

2. Algunos universitarios

Estos son los nombres de algunos beneficiarios de Karibu Sana que ya son universitarios:

  1. Movine Otieno, Bachelor of Commerce Masinde Muliro University
  2. Joshua Bulimo, Bachelor of Arts Daystar University 
  3. Mary Sambai, Multimedia University
  4. Lameck Otiro, Strathmore University
  5. Alumno de Eldoret, Strathmore University
  6. Fredrick Oduor, Chuka University
  7. Joseph Oyola, Maseno University 
  8. Moses Wafula, Mount Kenya University 
  9. Eric Mwange, Kenyatta University
  10. Shadarack Kaloki empieza en 2024
  11. Valentine Akoth, empieza en 2024
  12. Lourine Odhiambo, empieza en 2024 
  13. Vincent Moguire, empieza en 2024
  14. Ezekiel Moguire ha terminado el grado en Psicología: es el primer graduado de Karibu Sana.
  15. Meldon Mambo, de Zambia, se graduó como enfermera y comadrona.
  16. Un chico de Kwetu, rescatado de la calle, se graduó en la universidad de Egerton (Kenia).

Judy Oloo, directora de Desert Streams, me contaba que doce antiguos alumnos suyos, becados en el colegio por Karibu Sana, están en distintas universidades de Kenia.

Moses Wafula, segundo por la derecha, ha empezado Derecho

3. Becas de educación: el core

Lo más importante es esto que indica Michael Babu, que lleva de forma totalmente eficaz la gestión de Karibu Sana en Nairobi: 

«En 2023 Karibu Sana ha continuado con su compromiso de proveer acceso a la educación a muchos niños vulnerables de Kenia. La entrega de las becas se hace directamente con los colegios en completa colaboración con los padres o con los custodios, quienes son plenamente responsables del bienestar y del aprovechamiento de sus hijos». 

En la actualidad el número de estos alumnos beneficiados es de 451. 

De ellos, 351 reciben ayudas de Karibu Sana directamente, pagando nosotros la matrícula del colegio. Los otros 100 lo hacemos por un acuerdo de colaboración con dos escuelas: Desert Streams y Transform School. Allí financiamos los estudios de 80 y 20 alumnos respectivamente, y la dirección se encarga de repartir la ayuda según las necesidades. Les hemos pedido que nuestro dinero lo gasten de forma prioritaria en sueldos de profesores. De ese modo llevan unos años pagando puntualmente los salarios y pueden hacer un buen equipo.

Estos dos colegios consiguieron un hito importante en 2023: 30 alumnos de Desert Streams y 8 de Transform pasaron la nota de corte necesaria para comenzar la Secundaria, casi la totalidad de los que se presentaron al examen nacional obligatorio. En 2016 ninguna de estas dos escuelas lograba que sus alumnos siguieran estudiando: los alumnos abandonaban la educación a los 14 años.

Ya conocéis el criterio de trabajo de Karibu Sana: las familias de los niños tienen que pagar uniformes y libros, además del tercer trimestre (el más breve y barato). Así nosotros podemos ayudar a más. Pero sobre todo no les quitamos la responsabilidad de cuidar de sus propios hijos, y evitamos crear una situación de dependencia respecto de nuestra ayuda. 

 Sólo con niños de Kwetu y Dorothea (rescatados de la calle) y con huérfanos totales nos encargamos de todo. Por cierto, las niñas de Dorothea a las que pagamos el colegio pasaron en 2023 de 36 a 49.

De la calle al colegio y a la vida

4. La importancia de colaborar

Cuando llegan a los 18 años, ya vayan a universidad o a formación profesional, pedimos a los alumnos que colaboren en su propia educación: buscando becas, trabajando, ayudas familiares o de su comunidad, etc. Hacemos un estudio personalizado con cada uno de ellos para ver qué pueden aportar y siempre pueden hacer bastante. 

Erik nos agradeció explícitamente que le pidiéramos su colaboración. Comenzó un pequeño negocio de venta de vegetales y tomates para poder pagarse la escuela de odontología. Logró cubrir los gastos de matrícula, nosotros nos encargamos de la manutención, y dejó el negocio en manos de su madre que con eso se ha puesto a trabajar. Estaba muy contento al descubrir que él también podía cuidar de sí mismo.

 

5. Viajes

Nos ayudaron dos voluntarias de Bélgica que asesoraron la gestión económica de Desert Streams. 

Visitaron España, con sus propios medios, Michael Babu y, en viaje diferente, Sister Carol, directora del centro de acogida de niñas de la calle Dorothea Rescue Centre. Con ambos tuvimos sesiones de trabajo en la Fundación Promoción Social, de la que Karibu Sana forma parte. Fueron muy fructíferas.

Sister Carol en una sesión de trabajo en Fundación Promoción Social

 

6. Navidad en Transform

En colaboración con la Fundación Cooperación Internacional, por tercer año consecutivo gestionamos una fiesta de Navidad en Transform School que permitió comprar libros de texto, material deportivo, juguetes, balones, para los niños y niñas de esa escuela. Se les entregaron en una fiesta navideña organizada a tal efecto, para asombro de esos niños que a veces no pueden comer ni pollo en esa fiesta central y que, por supuesto, no han recibido nunca un regalo tan extraordinario.

Patrick con algunos de sus alumnos de Transform School

7. Dispensario en Dorothea

Dorothea Rescue Centre, con nuestra colaboración y la de agentes locales, pudo levantar un dispensario médico para atender a las familias de la zona donde se encuentra, en el campo. De ese modo hacen una gran labor con los locales y logran una fuente de financiación independiente de ayudas externas.

 

8. Con familias y con huérfanos

Seguimos cuidando de algunas familias en situación de desamparo, bien viudas enfermas con varios hijos o huérfanos totales a los que mantenemos. Son un total de doce. Por mi parte, yo sigo enviando todos los meses una cantidad para la manutención de Moses Javier, rescatado a finales de 2016 con una semana de vida, adoptado por una familia fantástica de Nairobi que me nombraron como su padre (de ahí su segundo nombre) y que ya ha cumplido siete años y ha empezado 1º de primaria.

Fiona: más feliz que una perdiz

 

9. Listado de alumnos

Lugar Alumnos
Eldoret

20

Dorothea

46

Desert Streams

80

Kwetu

25

Transform School

20

Destiny Junior

90

Alumnos Karibu Sana 

150

Universidad/FP

20

TOTAL

451

 

10. Costes

El total del coste en educación ha sido de 13.000.000 de chelines kenianos, 83.000 euros. En ayudas a familias y a huérfanos hemos gastado casi 2.000.000 de chelines kenianos, es decir, 12.600 euros. 

Las comisiones bancarias y otros gastos han sido de 1.000 euros. 

 

11. Un proyecto de Fundación Promoción Social

Dedicamos el 7% de cada donación a colaborar con los gastos indirectos de la gestión que hace la Fundación Promoción Social. Así ayudamos a pagar los sueldos de los empleados de la misma. Este año hemos aportado 11.701 euros. Es mucho menos que lo que costaría tener a una persona a sueldo para hacer esas gestiones. De ese modo, el 93% de cada euro donado llega a destino en Kenia.

La Fundación Promoción Social hace un trabajo imprescindible que posibilita que Karibu Sana exista. Por un lado, el control de la trasparencia en el recibimiento y uso del dinero donado junto a toda la gestión administrativa para que los donantes puedan desgravar por sus donaciones. Por otro, un esfuerzo constante por conseguir nuevas vías de financiación que aumenten las posibilidades de ayuda de Karibu Sana. Se dedican a ello especialmente Iván Aznar y Macarena Cotelo en proyectos, y Teresa de Prada en financiero.

En concreto, tenemos en marcha la firma de un acuerdo con una fundación española a la que le ha encantado el proyecto. Ellos apuestan por colaboraciones a largo plazo, de modo que sería un acuerdo para varios años. Con él podríamos más que doblar el número de nuestros beneficiarios y la huella de niños yendo al colegio, formación de profesionales (profesores, trabajadores sociales, etc.). Están trabajando en ello, y cuando se concrete lo comunicaré.

 

12. Un proyecto con Strathmore University

También es impactante la generosidad de Strathmore University, nuestro socio local en el terreno. Se encargan de hacer todos los pagos a colegios, familias, Kwetu Home of Peace y Dorothea Rescue Centre, además de proponer soluciones creativas y de formación de directivos y profesores para que las instituciones con las que colaboramos mejoren en su eficacia y en su gestión. 

Nuestras dos personas principales allí son Michael Babu, del que ya os he hablado, y Luis Borrallo, un español que lleva más de veinticinco años en ese país y que trabaja en Strathmore University Community Service. Sin ellos Karibu Sana tampoco podría existir.

Una de nuestras ideas es comenzar a colaborar en el plan de becas para alumnos universitarios sin recursos de Strathmore University. Desde hace años desarrollan Macheo Program, dirigido a chicos y chicas de los dos últimos años de Secundaria. Consiste en que los sábados por la mañana durante el curso van al campus de la universidad alumnos de colegios de entornos desfavorecidos (de barrios de chabolas de Nairobi). Allí reciben clases de refuerzo de asignaturas para hacer con más éxito el examen nacional a la vez que el campus les inspira para seguir estudiando. Se trata de estrechar las diferencias. Los docentes son voluntarios entre profesores y alumnos de Strathmore University. Tras varias horas de clase se les invita a comer en la cafetería de la universidad. Es una labor impresionante.

De estos alumnos algunos son admitidos en Strathmore University y necesitan ayuda.  También se buscan estudiantes brillantes de entornos desfavorecidos por todo el país: aunque es una universidad privada, su empeño es que nadie con condiciones intelectuales se quede fuera por falta de recursos económicos. Para eso han organizado un sistema de becas con un espíritu análogo al de Karibu Sana: donantes particulares, alumni, empresas, profesores de la universidad que quieran participar con su nómina solidaria… Nuestra intención es participar, de modo que podamos seguir cumpliendo con nuestra intención fundacional: ayudar a alumnos sin recursos, esta vez en educación superior.

En estos momentos estamos estudiando cómo llevar a cabo esta colaboración.

Michael Babu, en un momento de relax

13. Ingresos, gastos y donantes

Las cifras de saldo, ingresos y gastos de 2023 han sido las siguientes:

Cash flow 2023 Importes
Saldo inicial 2023

191.065,78

Ingresos

167.161,59

Comisiones bancarias

764,31

Gastos relacionados con el proyecto

352,07

Aportación a FPS

11.701,31

Ayudas enviadas a Kenia

123.252,56

Saldo a disponer para ayudas

222.157,11

Saldo bancario

222.157,11

En 2023 han colaborado con Karibu Sana 294 personas o instituciones diferentes. La mayoría son donantes recurrentes que cada mes dan una cantidad entre 15 y 50 euros. Hay donaciones puntuales, especialmente en diciembre.

En los últimos cinco años los resultados de ingresos por donaciones en Karibu Sana han sido los siguientes:

Año Ingresos
2019

100,848

2020

105.000

2021

175.780

2022

172.950

2023

167.161

Total

721.739

Son unos números impresionantes. El primer año, 2016, tuvimos 36.000 euros de ingresos y ya me pareció un sueño. Me preguntaba: «¿De dónde sale tanta gente que quiere echar una mano a unos niños desconocidos a los que no verán jamás?». Imaginaos mi asombro, y mi ilusión, en este momento. Por vuestra generosidad, y porque los frutos de un proyecto tan sencillo como el nuestro están siendo evidentes. 

 

14. Coda

Como has podido ver, el saldo bancario a final de 2023 es de 222.157 euros. El día 3 de enero enviamos a Nairobi 100,000 euros para aprovisionar el pago de colegios en 2024. A día de hoy el saldo real es de 122.157,11. Volverá a disminuir con el envío para becas de estudio en Strathmore University. 

En este saldo no cuento los ingresos que se hayan recibido de donaciones en enero y febrero. Contar con estos fondos nos permite dar gran estabilidad al proyecto de Karibu Sana. Eso es lo que necesitan nuestros niños para terminar su etapa educativa sin el estrés de si podrán o no ir a la escuela al día siguiente. Ese estrés también desaparece de sus padres (muchas veces madres solas, por viudedad, abandono o por ser madres solteras), que con los niños seguros y alimentados en la escuela pueden dedicar cada día a buscar trabajo y sustento. Estamos mejorando muchas vidas, estamos haciendo cosas buenas, y eso tiene que ser para ti una razón de sano orgullo por colaborar con, por ser parte de, Karibu Sana.

Javier Aranguren

jarangurenechevarria69@gmail.com

javier@proyectokaribusana.org

21 de febrero de 2024

Resultados del Proyecto Karibu Sana en 2022

Víctor

Resultados Karibu Sana 2022

Quería compartir con vosotros algunos resultados de la labor de Karibu Sana durante 2022, cosa que todavía no había hecho. Ha sido un año fantástico, el 7º de existencia de este proyecto que empezó con un niño mendigo en octubre de 2015 y que ahora beneficia directamente a más de 400 niños y niñas en todas las etapas educativas, desde los 2 años a la educación universitaria.

Sister Carol y las niñas recién rescatadas en Dorothea Rescue Centre

 

Vestidas para la fiesta de admisión en la que queman la sucia ropa con la que vivían en la calle

1. Becas escolares

Estos son los datos de colegios:

Total alumnos Niños Niñas Primaria Secundaria
Becas Karibu Sana 141 68 73 24 117
Becas Kwetu 33 33 7 26
Colegio Mathare 90 48 42 90
Colegio Eldoret 20 6 14 8 12
Colegio Desert Streams 80 37 43 80
Becas Dorothea 36 36 33 3
Becas Universidad/FP 6 5 1
TOTAL 406 197 209 242 153
    1. Becas Karibu Sana son los niños y niñas de todo tipo de colegios que tenemos en diversos sitios de Kenia, especialmente provenientes de Nairobi.
    2. Becas Kwetu son los niños rescatados de la calle por las Sisters de María Inmaculada de Eldoret. Al acabar su estancia en ese proyecto les financiamos la educación secundaria en internados. Desde hace dos años las Sisters han buscado otras fuentes de financiación para acompañar a todos los niños que terminan su etapa de rehabilitación/reinserción social en su proyecto.
    3. Colegio Mathare se encuentra en el barrio de chabolas de ese mismo nombre.
    4. Colegio Eldoret está en la ciudad de ese nombre: es un grupo dirigido por Sister Lucy, de la misma orden que las Sisters de Kwetu.
    5. Colegio Desert Streams es un centro de infantil y primaria en Kibera, barrio de chabolas de Nairobi, con el que llevamos ya seis años colaborando, dedicado a los más pobres.
    6. Becas Dorothea es la escolarización de niñas rescatadas de la calle por este centro que lleva dos años en funcionamiento y que acaba de acoger a 20 niñas más.
    7. Becas Universidad/FP son los que han acabado la escuela y han comenzado estudios superiores. Al ser mayores de edad, siempre les pedimos que ellos mismos aporten algo, bien sea con ayuda de su comunidad o con su trabajo.

Nos encargamos 100% de los niños y niñas de la calle o de los huérfanos totales. En los demás casos pedimos la colaboración de las familias. Esta suelen ser los uniformes y libros y el pago del tercer trimestre (el más breve y, por tanto, el más barato). Es una medida necesaria para que valoren la ayuda, pues se hacen conscientes del esfuerzo que supone, pero sobre todo para que no pierdan la responsabilidad sobre la educación de sus hijos, es decir, para que sean conscientes de su responsabilidad y dignidad.

Junior, Barbra y Moses en su nuevo colegio

2. Otros proyectos

    1. Ayudamos a algunas familias en las que la madre está gravemente enferma y no hay padre, o a niños que son huérfanos totales.
    2. Hemos terminado la ampliación de un dispensario médico en Kwetu, en el pueblo de Ruai, que atenderá a 700 familias de la zona, y que para el proyecto de niños de la calle será una fuente constante de ingreso y financiación. Ahora cuenta con servicio de asistencia al parto y pediatría, quizá lo más importante.
    3. Amueblamos el centro de Dorothea para rescate de niñas de la calle.
    4. Lo mismo con Tresgard Caring Centre, en Eldoret, para niños de familias muy marginadas.
    5. Conseguimos financiar los regalos de Navidad de Transform School y los de Desert School. Para muchos de ellos fueron los primeros regalos de sus vidas, los primeros juguetes.

Dos chicos de Karibu Sana están estudiando la carrera en Strathmore University. Uno, Samson Omondi, logró allí una beca del 100% y otro, Lameck Otiro, del 70%. Nosotros les ayudamos con la manutención y libros, además de ese 30% de matrícula que le faltaba a Lameck. Los dos están logrando unas notas extraordinarias. Otro, Erick, estudia odontología. Y Ezequiel terminará en 2023 psicología. En todos los casos, son los primeros universitarios de sus familias.

Lameck, que empieza su tercer semestre en Contabilidad y Empresariales

Ha cambiado el plan de estudios en el país. Ahora son 6 años de primaria (no 8) y 6 de secundaria (no 4). Eso ha hecho subir los precios de la educación. Además el país se encuentra en una buena crisis económica: post-covid, poco turismo, grave sequía, inflación.

 

3. Datos económicos

Nuestros ingresos económicos, muy positivos, en 2022 han sido los siguientes:

Número Ingresos
Donantes recurrentes 240 98.312
Donativos puntuales 51 21.888
Donantes especiales 3 52.750
Saldo 2021 153.193,60
Total 326.143,6

Los gastos, gestión y envíos a nuestro socio local en Kenia (Strathmore University) para pagos de colegios y demás necesidades, han sido:

Concepto Importes
Comisiones bancarias 861,80
Gastos relacionados con el proyecto 157,12
Financiación de Fundación Promoción Social 12.106,54
Ayudas (envío a socio local para su distribución) 121.953
Total gastos 135.078,46

En conclusión, el saldo en enero de 2023 a disponer en ayudas era de 191.065,78 euros.

El 4 de enero de 2023 enviamos a Nairobi 99.000 euros para los pagos de los dos primeros trimestres del curso, que comienza en enero.

De ese modo, el saldo real en enero de 2023 es de 92.065,60 euros. Esta cifra asegura la continuidad del proyecto y nos abre a la posibilidad de ayudar a más gente.

4. Crecimiento

Un último comentario sobre las perspectivas de crecimiento: desde su inicio pensamos que el Proyecto Karibu Sana no debe ser demasiado grande para poder asegurar el seguimiento personalizado de los beneficiarios. Preferimos acompañar bien, de uno en uno, que una tarea demasiado amplia en la que se pierda la perspectiva de la persona concreta. Al inicio pensábamos que nuestro techo estaría en las 100 personas beneficiarias. Ahora tenemos más de 400. Las perspectivas de crecimiento apuntan a los niños y niñas de Kwetu y Dorothea, para que no vuelvan a la calle, y a seguir con nuestros beneficiarios en la educación superior, universidad o formación profesional, que siempre son más caras.

Estamos actualmente en negociaciones con alguna fundación que muestra su interés en lo que hace Karibu Sana. Eso podría ser una excelente ocasión de crecimiento.

De modo principal, queremos depender de nuestros donantes puntuales. En ese sentido, tu tarea como socio va más allá de lo que puedes aportar. También podría incluir la posibilidad de dar a conocer Karibu Sana a otras personas. Permíteme sugerirte para ello que regales el libro Cien pares de zapatos, para que accedan de primera mano a este milagro que, en buena medida, se realiza cotidianamente gracias a ti.

 

PD: Todos los ingresos/gastos están auditados por la Coordinadora de ONGD–España, y los gestiona la Fundación Promoción Social.

Con Michael Babu

Muchos ya me habéis oido hablar de él: Michael Babu. Es la pieza principal de Karibu Sana en Nairobi. Michael trabaja en el servicio de acción social de Strathmore University, y colabora con Karibu Sana desde el principio, gestionando las ayudas y, sobre todo, ayudando a las personas.

–Vienen muchos a verme al despacho. Les pido que me traigan las notas, y que me digan cómo nos van a ayudar a ayudarles. A los chicos y chicas, según se acerca el final del colegio, les pido que me cuenten qué plan tienen para el futuro. No quiero decírselo yo, sino que ellos decidan, descubran lo que necesitan, tomen decisiones y se comprometan con ello.

Michael, Macarena, Iván y Javier

Me cuenta Michael que están muy contentas las autoridades de Strathmore University con Karibu Sana. Sobre todo porque ven lo que se está haciendo con más de cuatrocientos niños y niñas, y porque ya se ven los frutos y cómo muchos de ellos han madurado un montón en estos años. Ya hay dos de Karibu Sana en esa universidad, haciendo muy bien sus estudios superiores con becas de la propia universidad.

Michael ha pasado por Madrid y nos pudimos reunir con él los de la Fundación Promoción Social (Macarena e Iván salen en la foto) y yo mismo.

En la FPS hablando de lo que me apasiona.

Y el lunes 30 de enero yo tuve la suerte de ir a la Fundación Promoción Social, de la que formamos parte, a explicar el proyecto a los patrones de la fundación y a otras personas interesadas.

Datos de exámenes y de donantes

Quería compartir con vosotros algunos datos. Aviso: son fantásticos.

 

Examen KPCE

Primero: en Kenia han hecho un examen nacional llamado KCPE (Kenya Certificate of Primary Education). Es el que se hace para pasar de Primaria a Secundaria, que se hace entre 8º de Primaria (equivalente a 2º de la ESO) y 1º de Secundaria (3º de la ESO). Es un momento en el que muchos alumnos, especialmente de las escuelas y entornos más desfavorecidos, abandonan la educación: la Secundaria no es obligatoria, es más cara que la Primaria, y no siempre hay sitio para todos. Algunos niños se ponen a trabajar, muchos empiezan a no hacer nada. En el caso de nuestros niños y niñas la información es muy esperanzadora.

Unas esforzadas alumnas

 

La prueba es sobre 500 puntos. Esto es orientativo pues los mejores alumnos del país suelen llegar ligeramente por encima de 400. De hecho, se considera que cualquier nota por encima de 300 es realmente buena, y asegura una plaza en secundaria.

Nuestros niños tienen orígenes muy desfavorecidos. Algunos han sido rescatados de la calle, perdiendo a veces más de un año escolar en un ambiente muy peligroso que incluye violencia, abusos y drogas. El resto vienen de familias muy pobres, con frecuencia desestructuradas, incapaces de conseguir los 15 o 20 euros que cuesta la escuela al mes. Además no suelen tener acceso a libros y en sus casas de una sola habitación es muy difícil estudiar. Lo que más hemos notado es que cuando le facilitas los estudios de forma continuada durante años (con algunos ya llevamos cuatro) los resultados dan un vuelco espectacular, y muchos de ellos alcanzan un nivel más que notable. Creo que eso hace ver de un modo muy objetivo la eficacia de un proyecto educativo como Karibu Sana, en el que no se sustituye el esfuerzo de los alumnos, pero se les facilita una educación sin estrés que les abre puertas a un futuro mejor y les permite tener una infancia más feliz y segura.

Os pongo los datos de algunos, también para que veáis la riqueza de los nombres de estos niños:

Kevin R ha sido el primero de su colegio, con 387 puntos. Lucy W obtuvo 333, aunque como es muy responsable quería más. 

El momento de la verdad

Los resultados de los chicos de Kwetu Home of Peace (todos ellos antiguos niños de la calle) han sido: Teddy M, 363; Dickens O, 353; Samuel N, 347; Brian N, 344; Beberlyne H., 322; James W., 315; Joseph K., 309. James K., 306; Alphonse M, 305. El único al que no le ha ido bien es Harrison A., con 198. Detrás de todos estos resultados hay un esfuerzo brutal de superación de circunstancias adversas que nos son inimaginables.

En el colegio Desert Streams of Kibera, que cuidamos especialmente dando un fondo de becas equivalente a 80 estudiantes, se han presentado 23 candidatos. De ellos, 17 han sacado notas por encima de 255 puntos (la más alta ha sido de 355). Los otros 6 andan entre los 240 y los 225. Son también resultados excelentes y, en algunos casos que conozco de forma personal, extremadamente meritorios.

 

Donantes del Proyecto Karibu Sana

Por nuestro lado, en España, el Proyecto Karibu Sana no para de crecer. Comparto estos datos:

En un proyecto educativo la clave son los donantes recurrentes: personas que se comprometen a donar una cantidad, casi siempre pequeña, a lo largo del tiempo, sabiendo que la educación de un niño lleva años. La progresión en 2020 y en 2021 ha sido espectacular. Se relaciona por un lado con las campañas en las redes sociales de dos de nuestros socios (Miguel Camarena y el Instituto Europeo de Psicología Positiva); por otro, con la oportunidad que tuvo Javier Aranguren de aparecer en el programa ‘Últimas preguntas’ de La 2 de RTVE explicando el proyecto. Estas son las cifras:

  • En 2019 éramos 88 donantes recurrentes;
  • En 2020 éramos 153 donantes recurrentes;
  • En 2021 ya somos 217 donantes recurrentes, y seguiremos aumentando.

De forma similar, hemos pasado de 39 donantes puntuales en 2019 a 121 donantes puntuales en 2020. Y en lo que llevamos de 2021, los primeros cuatro meses, ya hemos tenido 97 donantes de este tipo: ¡es un crecimiento asombroso!

Javier Aranguren en plan televisivo

 

Fondos del Proyecto Karibu Sana

Durante 2020 se cerraron los colegios de Kenia por el covid-19. Eso significó que no pudimos mandar dinero para pagar el último semestre y acumulamos en ‘caja’. Terminó el año con un saldo de 158.945’19 euros.

En lo que llevamos de 2021, cuatro meses, hemos tenido unos ingresos de 60.659’50 euros.

En lo que llevamos de 2021 los gastos bancarios han sido de 1.003’59 euros; los gastos indirectos (colaboración del 7% con la Fundación Promoción Social de la Cultura por su gestión impagable) han sido de 4.246’17 euros. Hemos enviado a Kenia para pagar los colegios y otros proyectos un total de 73.331’88 euros. Eso significa que tenemos un saldo a nuestro favor de 141.023’01 euros.

Con ese dinero tendremos que pagar los dos semestres escolares que quedan por delante para nuestros 393 niños beneficiarios directos. También vamos a equipar un centro de acogida de niñas de la calle (Dorothea Centre) al que dedicaremos 7.000 euros por este concepto y 7.000 euros más para dotarles de paneles solares con los que conseguir energía. Tenemos también en marcha la ampliación de un dispensario médico en la sede de Ruai de Kwetu Home of Peace.

El año próximo, 2022, llegarán a la universidad o a escuelas de formación profesional superior nuestros primeros beneficiarios. Espero que podamos seguir ayudándoles, ya cambiando alguna condición (parte beca, parte préstamo) para que también ellos, mayores de edad, asuman compromisos. De todos modos, lo conseguido hasta el momento ya es asombroso.

Y por eso los niños, y todos los que hacemos Karibu Sana, os damos las gracias.

¡Feliz Navidad!

Os quiero desear, junto a todo el equipo de Karibu Sana ( Miguel Camarena Salud y el Instituto Europeo de Psicología Positiva, la Fundación Promoción Social, Michael Babu, Manuel Domínguez con la web, los voluntarios, las monjas de Kwetu Home of Peace, los directores de colegios en Kenia, ¡los niños!), una muy feliz Navidad.

Celebran al Niño Dios en Kwetu.

Con vuestra ayuda (económica, en oraciones, hablando de nosotros, comprando Cien pares de zapatos) vamos consiguiendo que muchos niños tenga su Navidad todo el año: porque se saben queridos, porque son conscientes de que importan, porque consiguen la seguridad que da una educación, porque van ‘creciendo en sabiduría, estatura y gracia ante Dios y ante los hombres».

¡Bailad con ellos, reíd con ellos, dad con ellos…, y sed felices como conseguís que lo sean ellos!

¡Gracias!

 

Javier

Karibu Sana y sus nuevos socios

Miguel Camarena y Gabriel Coll

Dos (cuatro) valientes

Debo reconocer que son unos valientes. El pasado mes de marzo un alumno me presentó a Miguel Camarena. Cenamos una noche y Miguel compartió conmigo parte de sus sueños: dedicado al deporte y a mejorar la vida de sus clientes por medio de ejercicio, dieta y motivación, decía que todos los años donaba, de acuerdo con Ángela, su mujer, parte de sus beneficios para tareas sociales. «Las cosas me van bien, pero por mi estilo de vida no estoy especialmente interesado en un gran coche o en una casa espectacular. Creo que me gusta más dar, hacer algo bueno». De hecho, estaba pensando en iniciar una fundación que le permitiera, por ejemplo, construir un colegio en algún lugar de África…, no tenía muy claro ni qué ni cómo. Y entonces le conté Karibu Sana.

Cinco soñadores: Miguel, Gabriel, Dafne, Ángela y Javier

Tiempo más tarde Miguel coincidió con Gabriel Coll en un evento en Vigo. Gabriel, y Dafne, su mujer, tenían una inquietud similar: si todo su trabajo (dirigen el Instituto Europeo de Psicología Positiva) se focaliza en hacer mejor la vida de sus clientes, ¿cómo no multiplicar esos efectos en personas necesitadas? También andaban pensando en iniciar una fundación. Miguel le habló de Karibu Sana y de un filósofo que vivía como ellos en Madrid… En mayo Javier fue a visitar a Gabriel y Dafne en sus oficinas. La reunión acabó con sonrisas.

Visita a la FPS

Un día de octubre Javier convocó a ambos para conocer la Fundación Promoción Social. Así podían ver de cerca una fundación con más de 30 años de experiencia, podían preguntar todas sus dudas y descubrir la profesionalidad que exige un trabajo bien hecho en el campo de la cooperación. De esa reunión, agradable y productiva, surgió la idea de reconducir el proyecto inicial: ¿Y si en vez de empezar algo nuevo apoyaran algo que ya funciona y que redundará en beneficios reales e inmediatos para una multitud de niños en edad escolar? ¿Y si colaboran con Karibu Sana de una forma ‘estructural’?

Kwetu, el mejor sitio para estar

¿Un viaje a Nairobi?

Así surgió la idea de viajar con Javier Aranguren a Nairobi en enero, los días en que Javier tenía previsto dar unas clases en Strathmore University, y así podían conocer de primera mano el proyecto y decidir con toda tranquilidad.

Sin embargo, los planes se torcieron: a Javier le encontraron un tumor y la oncóloga fue inflexible. «Tú no vas a Kenia, querido, sino a quimioterapia». Miguel y Gabriel (y Ángela y Dafne) tuvieron que tomar una decisión no demasiado fácil: ¿ir a Nairobi solos? ¿Sería seguro? ¿Habría algo que hacer? Superaron el vértigo con valor, Javier les organizó un plan de visitas («Así descubriréis lo que es la hospitalidad keniana, y veréis Karibu Sana sin mi mediación ni mi influencia…»), y el 4 de enero despegaban rumbo a África del Este.

En Desert Streams: al cuidado de los más necesitados

Han contado su viaje en Instagram. Quedaron deslumbrados de la acogida de Sister Carol, de Michael Babu y Strathmore, de Desert Streams. Durmieron en Kwetu junto a los niños de la calle. Probaron su comida, sus matatus, sus sueños. Analizaron multitud de problemas (sobre todo de sostenibilidad y motivación) que encaran esas personas heroicas que dedican sus vidas a los más necesitados a veces en condiciones laborales muy difíciles e inestables. Dieron clases en inglés. Hicieron deportes con niños, con trabajadores sociales, con monjas (ellas eran más fuertes que guerreros masai). Visitaron un parque nacional y caminaron entre antílopes. Y descubrieron con sus propios ojos que el Proyecto Karibu Sana encajaba perfectamente con sus sueños.

 

Ahora

Ha pasado más de un mes desde su vuelta. Hemos decidido colaborar. Miguel y Gabriel, y Dafne y Angela, y sus instituciones, aportan muchísimos: tanto en contenidos con los que queremos formar a profesores y educadores de Kwetu y de colegios de los barrios de chabolas de Nairobi, como en dinamismo y en conocimiento de cómo usar las redes sociales. Además tienen cientos, miles de amigos, muchísimos de ellos interesados también en la filosofía del dar. De hecho, estamos notando un alentador aumento de donaciones que ayudarán a que el proyecto crezca y a que los beneficiarios sean más y estén mejor atendidos.

Encontraréis los enlaces a sus plataformas en la portada de esta web, junto con la Fundación Promoción Social. Los tres, más Luk Comunicación y Strathmore University, son las piezas clave para que este proyecto siga en marcha y esté ya dando tanto fruto.

Ejercitamos la filosofía del dar

 

Cien pares de zapatos

PD: En cuanto el tratamiento de mi cáncer empiece a llegar a su final (me quedan dos quimioterapias y una operación, es decir, como mes y medio) nos lanzamos a la publicación del libro sobre Karibu Sana. Se titula Cien pares de zapatos, y lo va a publicar la eEditorial Nueva Ea. Queríamos que yo estuviera otra vez en forma para poder dedicar esfuerzos a su presentación. Los beneficios irán todos al proyecto, y yo creo que será un regalo extraordinario para vuestros amigos.

En breve lo tendrás en tus manos…

Informe Karibu Sana 2019

En la entrada de esta semana solo os quiero adjuntar el informe de la actividad de Karibu Sana en 2019. Lo tenéis en la portada de la web y también aquí.

Lo he redactado yo. Quiero agradecer a Michael Babu, Strathmore University y a Fundación Promoción Social los datos que me han enviado así como su gran trabajo. Y a Manuel Domínguez Churruca y a su empresa Luk Comunicación el excelente diseño del informe, otra de sus muchas aportaciones a la comunicación de este proyecto.

¡Espero que lo disfrutes!

Uno de los grupos que estrenan internado
Orgullosos de sus uniformes