Kevin, de Kwetu al Cielo

Compartir en facebook
Facebook
Compartir en twitter
Twitter
Compartir en linkedin
LinkedIn
Kevin, que se acaba de marchar a vivir la Navidad en el Cielo

Me comunica Perminus Chomba, el profesor encargado de los niños de la calle de Kwetu, el fallecimiento de Kevin, de 13 años.

«Hemos perdido a uno de nuestros queridos niños, Kevin Kinyanjui, y mañana celebraremos su vida bien vivida. ¡Que el Señor Todopoderoso te dé fuerzas!».

‘Celebrar la vida’, así es como llaman en Kenia a los funerales.

Quería ser artista. Ahora está ante la Belleza.

En seguida le pongo cara. Me escribe Sara Mehrgut, ‘triste y espantada’. Me recuerda que Kevin pertenece al primer grupo que ellá conoció en Kwetu, al segundo que conocí yo. Un niño tímido (de esas timideces que a veces parecen un poco chulas), guapísimo, de una sonrisa inmensa. Tenía además vocación de pintor, corazón de artista. Y había pasado por lo que todos estos niños: una temporada larga vivida en la calle (cualquier tiempo por encima de un instante es largo), por culpa de la miseria económica de la familia, que le arrastró a buscarse la vida en la calle. Esa vida sería como la de todos: robos, hambre, comer basura, dormir al raso, mucho miedo, seguro que palizas. Le rescataron las Sister de Kwetu, y le proporcionaron un hogar y motivos para poder vivir feliz desde ese primer momento en adelante.

Me cuenta Sara que Kevin volvió a su casa para pasar con sus padres las vacaciones escolares: uno de los objetivos de Kwetu es reintegrarlos con la familia. Terminada su estancia en Kwetu nosotros hubiéramos seguido cuidando de él, para que no le faltaran medios con los que frecuentar la escuela…

Viendo la tele, con camiseta rosa, en Kwetu.

Pero Dios es misterioso. Kevin volvía a casa, en un slum de Nairobi (barrios de chabolas). Debió resbalar en el barro formado por una de esas cloacas expuestas al aire, entre aguas negras y basuras. En su intento por salir de aquel lugar infecto agarró uno de tantos cables por donde marcha la electrícidad (siempre pirata, dominada por las mafias del slum, ante la indiferencia de los que gobiernan que cobran un tanto por ciento de lo que los mafiosos se llevan al vender la electricidad que roban a los pobres de las chabolas). El cable tenía el cobre expuesto y le soltó una descarga elécrica que lo mató al instante, haciendo salir volando a su cuerpo electrocutado, que quedó atrapado en ese mismo cable por la garganta.

Firmaba sus pinturas como KEVO. Ahora ya no pinta, contempla. Y va a pasar sus primeras Navidades con su familia del Cielo. Y yo estoy seguro de que la Virgen le está mirando por lo menos con el mismo cariño con que miraba a su Niño, y que Kevin se encuentra completamente asombrado de cómo una vida tan dura como aquella por la que ha pasado ha podido conducirle hasta tanta perfección y tanta felicidad.

Navidad en el Cielo, misión cumplida…, pero yo estoy triste, y me encomiendoa él para que haga que no me falte nunca su paz y su sonrisa.

Un día que me hicieron fiesta en Kwetu. Kevin es el del extremo
El mismo momento, sonriendo (como casi siempre).
Compartir en facebook
Facebook
Compartir en twitter
Twitter
Compartir en linkedin
LinkedIn
Otras historias del Diario

Informe Karibu Sana 2023

He pedido a Manuel, que nos lleva esta página web, que nos ponga bonito este informe para dejarlo en PDF en la web, pero como eso lleva un tiempo, quería compartirlo ya con vosotros. Perdón por una entrada tan larga, aunque creo que merece la pena leerla.   Informe 2023 Cuando en octubre de 2015

Seguir leyendo >>

De la calle a la universidad

Algunos datos Comenzamos 2024 con un mensaje de Michael Babu, el hombre de Karibu Sana en Nairobi, señalando los objetivos con los que partimos desde el primer día. En esa tabla tenéis las distintas personas a las que atendemos y el presupuesto (en Kenyan Schillings y en Euros). Aparecen: 1– Nuestros alumnos 2– Los de

Seguir leyendo >>

¡Feliz Navidad!

Aprovecho una vez más estas fechas para desearte a ti y a tu familia una muy feliz Navidad. La celebración del nacimiento del Salvador en la fría noche del Portal y del Pesebre trae con facilidad a la memoria la inocencia y la pobreza de los niños de Karibu Sana. … pastores Tú con tu

Seguir leyendo >>

Samuel estudiando en su habitación en Kwetu.

Recibe el Diario de Karibu Sana en tu mail